Cateterismo Cardíaco

El cateterismo cardiaco es la técnica invasiva mediante la cual se visualiza la circulación del corazón, la cuantificación de la función ventricular así como la medición de las presiones en distintas zonas del sistema cardiovascular.

La técnica comienza con el acceso vascular. En la actualidad, más del 50% de los accesos se realizan mediante la arteria radial derecha, localizada a nivel de la cara externa de la muñeca. Otros accesos son la arteria cubital, la braquial o la arteria femoral a nivel del pliegue inguinal. El paciente se encuentra despierto, con una sedación superficial y con analgesia local en el punto de punción. Una vez anestesiada la zona se realiza la punción de la arteria a través de la cual se introduce un catéter (un pequeño tubo flexible de aproximadamente 2 mm de diámetro) en el interior del vaso. El catéter se dirige a través de la aorta hacia el corazón, una vez allí se introduce ligeramente en el origen de una arteria coronaria. Posteriormente se inyecta un contraste yodado, opaco a los rayos X que nos permite visualizar la circulación coronaria.

La visualización de la circulación coronaria recibe el nombre de CORONARIOGRAFIA. Si lo que vemos es la aorta hablamos de AORTOGRAFIA, y si vemos otros vasos sanguíneos ANGIOGRAFIA y su localización correspondiente. Además de esto, podemos ver la movilidad el músculo cardiaco, la fuerza de contracción y el tamaño, hablamos entonces de VENTRICULOGRAFIA. En todos estos casos el acceso es mediante una arteria a través de la cual alcanzamos la aorta, hablamos por lo tanto de CATETERISMO IZQUIERDO. Si lo que queremos valorar es la presión a nivel del corazón derecho y la circulación pulmonar, el acceso será venoso y hablaremos de CATETERISMO DERECHO.

La indicación fundamental del cateterismo es la sospecha de enfermedad aterosclerótica de las arterias coronarias. Esta puede sospecharse en pacientes que ingresen por un infarto agudo de miocardio, en pacientes que realicen un test de ejercicio positivo, pacientes con disfunción ventricular izquierda o aquellos con enfermedad valvular que precisen cirugía.

En caso de visualizar estenosis en la circulación coronaria, se evalúa la posibilidad de revascularización, es decir de tratar la lesión responsable. Esta puede realizarse de forma quirúrgica “a corazón abierto“ (son los llamados by- pass) o percutánea, en el mismo laboratorio de hemodinámica. Este procedimiento se conoce con el nombre de ANGIOPLASTIA o INTERVENCIONISMO CORONARIO.

Los primeros pasos son comunes con la diferencia de que los catéteres utilizados permiten introducir dispositivos a su través. Estos catéteres denominados catéteres balón, tienen en su extremo un globo, que se infla en la estrechez aplastando la misma contra la pared del vaso. Una vez restablecida la circulación de sangre por la arteria coronaria, se implanta un STENT, una malla metálica que mejora el resultado obtenido con el balón. Los stents pueden ser farmacoactivos si están provistos de una sustancia que disminuye o ralentiza la progresión de la placa de colesterol a dicho nivel, o convencionales si están desprovistos de esta sustancia. Cada uno de los cuales tiene sus ventajas e inconvenientes.

Las complicaciones del cateterismo cardiaco hoy en día son bajas. Las más frecuentes son las que ocurren a nivel del acceso vascular, en forma de hematomas o pequeños sangrados y suelen ser leves. Las más graves son la rotura o perforación de una arteria coronaria, aunque son más graves son infrecuentes. Otra complicación seria la afectación renal como consecuencia del contraste utilizado para la visualización de las arterias coronarias. Esta complicación generalmente sucede en procedimientos largos y dificultosos.

Desde el mes de Enero de este año (2014) contamos en el HULA con una sala de hemodinámica que nos permite realizar 5 cateterismos al día para todos los pacientes de la provincia de Lugo.

 

Dra. Melisa Santás Álvarez

Unidad de Hemodinámica

Servicio de Cardiología

Hospital Universitario Lucus Augusti