La fibrilación auricular (FA) es la arritmia (alteración del ritmo cardiaco) más frecuente. La frecuencia cardiaca es el número de veces que el corazón se contrae por minuto y se expresa en latidos por minuto y el ritmo hace referencia a cómo se producen los latidos, pudiendo ser regular o irregular. El ritmo normal del corazón es el ritmo sinusal.
El ritmo sinusal se origina a partir de un impulso eléctrico en la parte alta de las aurículas, alcanzando a través del sistema de conducción eléctrico del corazón los ventrículos y provocando la contracción de éstos. La contracción de los ventrículos es lo que determina la frecuencia, que se percibe al tomar el pulso. El ritmo sinusal es regular y tiene la capacidad de adaptarse a las necesidades del organismo: acelerarse cuando hacemos ejercicio y enlentecerse cuando dormimos.
La FA se caracteriza porque, en lugar de un único estímulo eléctrico para cada latido, la actividad eléctrica de las aurículas se vuelve desorganizada, caótica, produciéndose múltiples estímulos simultáneos, de modo que a los ventrículos llegan los estímulos eléctricos de forma desorganizada, por lo que su contracción se produce de forma irregular y el pulso no es rítmico.
¿Cuál es la causa? La FA suele presentarse en personas que tienen hipertensión arterial, otro tipo de problemas de corazón, problemas de tiroides y otros.
¿Cuáles son los síntomas? Las molestias que puede producir son muy variadas. El síntoma más frecuente son las palpitaciones, sensación incómoda del latido del corazón en el pecho, generalmente rápido e irregular.
El diagnóstico de la FA es sencillo, es suficiente realizar un electrocardiograma. Con un adecuado tratamiento y seguimiento su pronóstico es bueno. La principal complicación de la FA se deriva del remanso de sangre en las aurículas debido a la falta de contracción, pudiendo formarse trombos, que salen del corazón a la circulación general. A este fenómeno se le denomina embolia, siendo particularmente grave en el cerebro. El riesgo de padecer una embolia no es igual para todos, si el riesgo es alto debe iniciarse tratamiento con fármacos anticoagulantes.
¿En qué consiste el tratamiento de la FA? El tratamiento debe abordar dos puntos principales:
- Control del ritmo y la frecuencia cardiaca, para reducir el número de crisis de FA y la frecuencia cardiaca durante las crisis. Esto se consigue con fármacos antiarrítmicos.
- Prevención de las complicaciones embólicas mediante tratamiento anticoagulante.
La hipertensión, la edad avanzada, la diabetes, haber presentado previamente una embolia, la insuficiencia cardiaca, el infarto de miocardio previo y el sexo femenino son las condiciones que se asocian a un mayor riesgo de embolia. A aquellos pacientes que cumplan al menos dos de estos criterios se les indicará tratamiento anticoagulante.
El tratamiento antiarrítmico no elimina la FA en su totalidad, simplemente reduce la frecuencia de los episodios y su intensidad. No todas las personas tienen el mismo número de crisis. Si los episodios aparecen de forma transitoria, retornando al ritmo normal, hablamos de FA paroxística; si la FA se mantiene sustituyendo al ritmo normal del corazón, hablamos entonces de FA permanente.
En ocasiones, se intenta devolver el corazón a su ritmo normal mediante un procedimiento denominado cardioversión eléctrica que consiste en aplicar una descarga eléctrica mediante unas palas colocadas a cada lado del pecho. A pesar de ser altamente efectiva no es un procedimiento curativo, es más, suele tener una eficacia temporal, siendo necesario continuar con el tratamiento antiarrítmico.
La Ablación es un nuevo tratamiento para la FA. Es un procedimiento que se realiza con catéteres, electrodos muy finos que se introducen en el corazón a través de una vena para intentar aislar el principal origen de la FA, las venas pulmonares. La “curación” se consigue en aproximadamente un 60% de los pacientes, tras uno o varios procedimientos, pudiendo retirarse el tratamiento antiarrítmico sólo en algunos casos. En las personas en las que se prevé que la posibilidad de éxito es baja el procedimiento no está justificado.
Dra. Juliana Elices Teja
Unidad de Arritmias
Servicio de Cardiología
Hospital Universitario Lucus Augusti